Uno de los elementos fundamentales del sistema de aguas pluviales de toda vivienda, negocio o industria es el canalón, que es un elemento que se encarga de recolectar y redirigir las aguas lluvias al alcantarillado; de no tenerlo, se presentarán diferentes inconvenientes, entre ellos filtraciones y goteras. En este artículo conocerá las consecuencias a las que se enfrentará si no tiene este implemento, de forma que la cotizo de inmediato con nuestros especialistas.
Es un conducto abierto que se ubica en los extremos de la lámina acanalada que se encarga de recolectar el agua lluvia y redirigirla a través de una tubería por el alcantarillado del edificio, de forma que al caer no se deslice por las paredes y genere inconvenientes de humedad y deterioro de la fachada e infraestructura.
Así mismo, tiene otras funciones, como servir de depósito de agua que se puede usar para el riego de jardines o en la red de sanitarios de la propiedad.
Si no tiene este elemento, el agua de lluvia caerá desde el tejado hacia las paredes de la fachada; puede que en un inicio esto no represente un problema, pero con el paso del tiempo, traerá consecuencias negativas para la edificación y las personas que se encuentran en su interior, como:
Una de las consecuencias más directas y notorias es la presencia de humedad en las paredes de la vivienda, la cual se representa a través de pintura levantada, moho, agua visible en los ladrillos o grietas en el concreto. Esta es dañina porque genera inconvenientes para la estructura y estética del edificio, además del estado de salud de las personas en su interior.
Este efecto no es inmediato, ya que unas pocas gotas de agua que se filtren no serán suficientes para generar la humedad, pero con el paso del tiempo es que se verán las consecuencias, en donde la infraestructura se debilitará y crecerán microorganismos que se dispersen por el aire y agraven diversas enfermedades pulmonares o alergias, en especial en niños y adultos mayores.
Al implementar los canalones pluviales, erradica la fuente de la humedad y podrá corregir los problemas que ya se presentaron, de forma que se erradique la problemática sin ninguna complicación y mantenga su construcción en perfecto estado.
No hay un inconveniente con las lluvias más incómodo y complejo de solucionar que las goteras en el tejado; en este caso, si no cuenta con una canaleta va a tener varias filtraciones, principalmente porque no tendrá una excusa para revisar el estado del techo de manera periódica.
En cambio, al tener que limpiar de manera constante este conducto de las hojas o tierra que se van acumulando, podrá aprovechar para revisar si hay una teja rota o movida de su lugar, que en la próxima temporada de lluvias provocará que el agua ingrese a la propiedad.
Cuando no se tiene un canalón, el agua se filtraba por las paredes y, eventualmente, llegará hasta los cimientos de la propiedad, los cuales están compuestos principalmente por hormigón y metal, que al contacto con el agua comenzarán a deteriorarse paulatinamente, al punto que sea riesgoso seguir habitando el edificio debido al riesgo de derrumbe.
En el caso que su tejado sobresale varios centímetros de la pared y caiga el agua pluvial directamente a la acera o jardín, con el paso del tiempo generará diversas complicaciones, principalmente inundaciones que afecten a los transeúntes y propietarios. Además, si cae sobre un espacio verde, el agua se apostará e impedirá que nazca la vegetación, incluso matará algunas plantas que no soportan el exceso de agua.
Estas complicaciones no sólo son molestas, sino que con el tiempo agrietaron el pavimento y generarán inconvenientes para toda la ciudad, incluso provocando accidentes como caídas.
El agua pluvial de una propiedad no puede caer sobre otro edificio cercano bajo ningún concepto, principalmente porque esto representa un daño a la propiedad privada de un tercero y no sólo es incómodo también es ilegal. Al no tener un canalón, en especial si el desnivel del techo se dirige hacia un espacio contiguo, el agua que cae por el tejado se filtraba por las paredes y cometerá los mismos inconvenientes.
Cuando esto sucede es porque la canaleta está obstruida, lo que quiere decir que el agua no transita como es esperado por la tubería pluvial, sino que se acumula y al cabo de un rato comienza a desbordarse al exterior. Por este motivo, es necesario que se revise de manera periódica el estado de esta estructura para retirar la suciedad.
Para identificar si es momento de revisarlo, fíjese en las siguientes señales:
Para conocer más de la importancia del canalón o cotizarlo en Soliacero, llámenos al (595) 133 4364 o escribanos al chat que encuentra en nuestro sitio web.