Desde hace mucho tiempo, la soldadura de pernos por descarga de condensadores es ampliamente usada en industrias de todo el mundo. La razón es la gran lista de ventajas que proporciona el proceso. Para este último, se utilizan pernos, como los famosos pernos Nelson, que, al combinar sus ventajas con las del proceso, ofrecen trabajos de la más alta calidad.
Durante la soldadura de pernos, se usa una batería de condensadores, cuya energía almacenada es descargada a través de la punta de ignición de los pernos en un lapso entre una y tres milésimas partes de un segundo. Este proceso aumenta la rentabilidad de los proyectos y permite terminarlos más rápido, además es bastante eficaz para muchas aplicaciones, como el diseño de metales, el moldeado de chapas y láminas (como la lámina acanalada) y en procesos de la industria automotriz.
La soldadura de pernos: un proceso ideal para fijar estructuras y chapas
Para entender este proceso, es importante saber en qué consisten los pernos. Se trata de piezas conectoras, cuya forma peculiar recuerda a la de un tornillo. Son varios los diseños que encontrarán en el mercado cuya elección depende de los requerimientos de los usuarios, como lisos, con rosca interior, roscados, con pinchos de aislamiento, pinzas sobre plano, terminales faston y los ya mencionados pernos Nelson, que proporcionan mayor estabilidad a las construcciones y otros proyectos.
Enfocándonos ya en el proceso de soldadura de pernos, consiste en aplicar los pernos de una manera muy rápida y sin necesitar material de aportación. Las industrias, especialmente las de construcción, lo utilizan para fijar estructuras y chapas sin los contratiempos implicados en otros procesos, como el taladrado o la perforación. Cabe mencionar que tiene la capacidad de crear uniones heterogéneas con bajos costos.
Razones para utilizar el proceso de soldadura de pernos
Ahora bien, son muchas las industrias que recurren a esta peculiar soldadura, como la automotriz, ferroviaria, naval, empresas fabricantes de equipos de hostelería y líneas blancas, entre otras. Las razones por las que la prefieren son las siguientes:
- Calentamiento localizado durante un lapso muy breve.
- Es ideal para usar con pernos de acero M3 a M10, acero inoxidable, latón y aluminio.
- No se requieren roscados, remachados, pegados, taladrados ni punzonados.
- Las piezas a las que se aplica la soldadura de pernos no se debilitan, lo que sí ocurre con la perforación.
- Al soldar en láminas con un fino espesor, no generan decoloración en la cara visible.
- Se recomienda ampliamente para soldar chapas con un espesor fino, con grosores mínimos de 0.5 mm.
- Deja muy pocas salpicaduras de soldadura, lo que resulta favorable para la estética de la pieza soldada.
- La productividad aumenta considerablemente, ya que los lapsos de duración del proceso son de milisegundos.
- Las uniones son herméticas, ya que no se requieren agujeros.
- Los puntos de la soldadura son solo accesibles, por un lado.
- No se requiere la protección del baño de fusión, debido a la rapidez del proceso.
- Los pernos se diseñan para aplicaciones donde se necesitan acabados decorativos sobre paneles visibles.
Si optarán por este proceso de soldadura, adquieran pernos Nelson
Como mencionamos, son varios los tipos de conectores que pueden usarse; sin embargo, recomendamos los pernos Nelson o autosoldable. Son diseñados para ser soldados a las estructuras para que actúen como una sola pieza, lo que evita que el material tenga puntos débiles, además que se utilicen perforadores y sellados. Se utilizan ampliamente en columnas, puentes, contenciones, además para dar mantenimiento a maquinaria pesada, como en elementos antidesgaste para cazos de excavadoras y perforadoras en frío de asalto.
Su peculiar nombre se debe a quién desarrolló esta tecnología utilizada ampliamente desde hace ocho décadas. Se requiere un ferrul o casquillo de cerámica para que el perno sea colocado en la pistola de soldado. Posteriormente, la punta del perno es presionado contra el acero y se activa la pistola para generar un arco eléctrico entre la superficie y el perno, lo que derrite el metal de la punta que es encerrado en ferrul para solidificarse de manera rápida y quedar completamente soldado por su base.
En procesos actuales de construcción, se requiere una cimbra metálica muerta sostenida por vigas de metal. Los pernos Nelson pueden colocarse sobre ella para sujetarla y determinar el modo de fijación sobre productos duros (como piedra o concreto) o huecos (por ejemplo, blocks o ladrillos).
Usar los pernos ayuda a reducir el peso total del edificio, pues permite usar vigas más ligeras, además su instalación es más rápida que las soldaduras manuales. Son bastante asequibles y no se requiere mucha capacitación antes de usarlos, tampoco deja filtraciones y evita daños superficiales o debilitamientos por taladrados.
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